El cambio climático representa una amenaza global no solo para la sostenibilidad del planeta sino para el conjunto de la economía. El paulatino aumento de la temperatura de la Tierra y la sucesión de desastres naturales provocan enormes pérdidas económicas a las organizaciones empresariales y suponen una amenaza real para las infraestructuras y, en general, para la actividad económica global. Por esta razón cada vez más empresas deciden aunar esfuerzos con los diferentes gobiernos y organismos internacionales a la hora de adoptar medidas que contribuyan a reducir la huella de carbono y las emisiones de gases de efecto invernadero, y a promover el respeto al medio ambiente en su actividad diaria.
01/06/2021