Programa Mozambique de Mundukide

Mundukide lleva 20 años colaborando con familias campesinas del norte de Mozambique, en un contexto de extrema pobreza generalizada. El 80% de las familias viven de la agricultura, trabajan todo a mano, y sólo ganan unos 300 euros al año.
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23/10/2024

Mundukide, dondequiera que se encuentre, trabaja con personas que históricamente han estado excluidas para que puedan sacar mejor partido de su trabajo y así mejorar sus ingresos y condiciones de vida, colaborando.

En concreto, el programa de Mozambique busca nuevos mercados, productos y técnicas; pone a disposición de las familias apoyo técnico e inputs; y las pone en contacto con los compradores.

En la actualidad, el 90% del personal del programa es mozambiqueño, y la metodología, totalmente participativa, ya que se ofrecen diferentes opciones en las que las familias eligen qué trabajar, qué técnicas utilizar y cuándo y a quién venderlas.

En la pasada campaña agrícola (2023-2024) han participado 14.500 familias que, tras invertir 150.000 euros de su bolsillo, cultivar 6.000 hectáreas y vender 3.500 toneladas de productos agrícolas, han obtenido un beneficio de dos millones de euros.

Por otro lado, dado que el programa de promoción de todo el sistema de asistencia técnica ha supuesto una inversión de 700.000 euros, se observa que, por cada euro gastado, las familias han ganado tres euros con su trabajo. En estos momentos, las técnicas y los productos promovidos por el programa constituyen el principal ingreso de las personas agricultoras en cuatro distritos, en los que participa más de un tercio de la población.

Además, hay que tener en cuenta el beneficio que obtienen las familias que utilizan por su cuenta las técnicas aprendidas en el programa: cerca de 20.000 familias han sido seguidas por el programa, y el año pasado obtuvieron un total de cinco millones de euros.

Solidaridad y responsabilidad

Decidir, trabajar, invertir, aunar fuerzas, aprender y utilizar nuevas técnicas. Esta es la forma natural de trabajar del programa y demuestra que, cuando la cooperación se pone al servicio del afán de progreso de las personas, incluso en las condiciones más difíciles se pueden conseguir cambios importantes.

Por ello, es necesario seguir colaborando, ya que las cerca de 30.000 familias que hasta ahora han participado en el programa representan solo el 20% de los agricultores de la comarca. La metodología y los sistemas de gestión del programa están cambiando, pero es necesario el apoyo para seguir colaborando con un número aún mayor de familias.

Cooperación cooperativa