Más leído
- 1. Javier Amezaga, nuevo director general de la División de Equipamiento de MONDRAGON
- 2. MONDRAGON y Mondragon Unibertsitatea México fortalecen su colaboración para la innovación y el desarrollo de talento en América Latina
- 3. La campaña de ayuda a las personas damnificadas por la DANA sigue activa en Eroski
- 4. Pello Rodríguez se reúne con el lehendakari Pradales
- 5. MONDRAGON celebra su Foro de Finanzas
- 6. Matrici solicita la apertura de la fase de liquidación
- 7. “Estoy muy ilusionado, MONDRAGON es un proyecto apasionante”
- 8. La Política Socioempresarial 2025-2028 de MONDRAGON, en el último número de TU Lankide
- 9. ¡Enhorabuena por medio siglo de cooperativismo!
- 10. "Una victoria de Trump y su repliegue proteccionista, afectarían a Europa"
“La diversidad cultural enriquece”
Mikel Mendibe es natural de Iurreta (Bizkaia), tiene 47 años y trabaja en Copreci desde febrero del 2015. Se incorporó a Copreci para encargarse de la dirección de la planta de China, después de un periodo de formación en Aretxabaleta.
¿Cuál ha sido tu trayectoria hasta llegar a Copreci?
Estudié ingeniería técnica de organización en Mondragon Unibertsitatea y, tras varias experiencias laborales, el año 2000 tomé contacto con la Corporación MONDRAGON y empecé a trabajar BATZ S. Coop y posteriormente me desplacé a China para comenzar allí con la dirección de producción de una nueva implantación; allí estuve otros 6 años. Después estuve un año de excedencia y en 2015 me incorporé a Copreci y ese mismo año vine a Copreci China.
¿Cuál es la situación de Copreci China en este momento, en cuanto a clientes, mercado...?
Copreci China está dividido en estos momentos en 4 negocios: Lavado, BBQ (Barbacoas), Negocio tubular y Cocción Gas Asia. En los negocios de Lavado y Cocción gas Asia, los clientes más importantes son, o bien clientes asiáticos o bien clientes europeos con empresa en China. Por ejemplo, BSH y SAKURA. En cambio, en los negocios Tubular y BBQ los clientes son de otra tipología. El cliente final es norteamericano, pero sus ensambladores son empresas chinas. Copreci cierras sus acuerdos comerciales con el cliente final y envía las piezas a los ensambladores chinos quienes montan nuestras piezas en la BBQ y las envían a los puntos de destino especificados. Aquí nuestros principales clientes son WEBER y CHAR BROIL.
En líneas generales, venimos de un año 2017 que fue un año muy bueno para Copreci China donde conseguimos nuestro récord de ventas situándonos en una línea cercana a los 20M de euros. Este año 2018, la situación ha sido más compleja. La situación económica mundial, fuertemente influenciada por el pulso económico que están disputando China y EEUU ha afectando fuertemente el mercado del negocio de BBQ. Las tasas aduaneras (que llegan a ser de hasta el 25%) que el gobierno estadounidense ha comenzado a aplicar a los productos provenientes de China, repercute directamente en nuestras ventas del negocio de barbacoas. Nuestros clientes finales están adoptando medidas para paliar el efecto de las tasas en sus productos y eso hace que Copreci, también tenga que adaptarse a esos cambios, que además, se están dando de manera muy acelerada.
La vida y cultura chinas es diferente a la nuestra; pensamos y actuamos de diferente manera. Pero, también es interesante. ¡Hay que aprender lo bueno de cada cultura!
Y ¿cuáles son los retos de futuro?
En línea con lo mencionado anteriormente, los retos de futuro son básicamente adaptarnos a las nuevas circunstancias del mercado de barbacoas, que está siendo muy cambiante, por lo tanto, nos exige que seamos flexibles. Además, nos planteamos crecer en el negocio de Cocción gas Asia y llegar a ser un referente, como lo somos en los mercados europeo y americano. Y también tenemos el reto de la innovación y automatización de procesos, ya que el coste de la mano de obra está teniendo cada vez más peso en la rentabilidad de nuestros productos.
En el terreno personal, ¿te has amoldado a la cultura china, el modo de vida, costumbres,...?
Han pasado ya 10 años desde que vine a China, por lo que para mí es ya bastante normal. Vivo con mi mujer, a quien conocí hace ya 8 años en Shanghái. Para mí, el cambio más fuerte fue el de pasar de vivir en mi caserío a vivir rodeado de enormes rascacielos en China. Pero una vez que te acostumbras, también ves ventajas.
Entre semana el día se te va entre el trabajo y los desplazamientos. Cada vez hay más tráfico y nos cuesta más tiempo llegar a la fábrica. Los fines de semana los aprovecho para estar más tiempo con mi mujer y poder ir a pasear y cenar en los lugares cercanos a nuestra casa. La comida china de aquí, en Zhuhai creo que es la mejor de toda China.
¿Cada cuanto tiempo vienes a casa? ¿Mantienes relación con tu gente aquí?
Siempre que puedo, vuelvo a Euskadi. Tengo la suerte de poder ir a casa cada dos o tres meses y, ¡ese es el secreto de que haya podido estar estos 10 años aquí! Volver a casa y estar con mi cuadrilla y mi familia es la satisfacción más grande que hay. Porque, cuando estás fuera, te das cuenta de lo que dejas en casa
¿Cuáles son tus planes de futuro?
Todavía me quedan unos años de estancia en China por delante. Volver a Euskadi siempre está presente en mi mente, pero este tipo de decisiones hay que tomarlas con tiempo y consensuándolas con la empresa. De momento, todavía hay retos importantes que tenemos que afrontar aquí en China. Por lo tanto, seguiré aquí unos años más.