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"La falta de microprocesadores está generando una crisis mundial de parada de líneas de fabricación en amplios sectores"
Fagor Electrónica lleva desde 1965 fabricando semiconductores y nunca una crisis como esta había llevado a paradas de las líneas de producción de sectores tan importantes, como el de automoción.
¿Desde cuándo se fabrican semiconductores en Fagor Electrónica? ¿Qué tipo de semiconductores fabricáis?
El mundo de los semiconductores es muy amplio y atendiendo a las funciones que desempeñan cada uno de ellos se subdividen en familias, siendo las más importantes: las Memorias, los Microprocesadores, la optoelectrónica y finalmente la familia de los componentes discretos. Los semiconductores que Fagor Electrónica viene desarrollando y fabricando desde 1965 se enclavan en la familia de los componentes Discretos. Dichos componentes discretos se encargan de rectificar, atenuar, limitar la señal eléctrica que circula por un circuito electrónico para que cuando llegue dicha señal al microprocesador/microchip del circuito esté en las condiciones adecuadas para que el microprocesador (cerebro) tome las decisiones pertinentes y emita las correctas señales/acciones para cualquier aplicación (vehículo, electrodoméstico, ordenador, servidor, ….). A día de hoy, la falta de suministro de microprocesadores (una de las familias más relevantes dentro del amplio mundo de los semiconductores) está generando una crisis mundial de parada de líneas de fabricación en amplios sectores y no solo en el de automoción.
En Fagor Electrónica fabricamos Diodos, Supresores, Tiristores, etc… que se se clasifican en la familia de Discretos dentro del amplio mundo de los Semiconductores.
¿Dónde se utilizan estos semiconductores? ¿A qué sectores os dirigís?
En Fagor Electrónica fabricamos Diodos, Supresores, Tiristores, etc… que se se clasifican en la familia de Discretos dentro del amplio mundo de los Semiconductores. Gracias a la amplia necesidad de electronificar nuestro mundo, el uso de nuestros productos está ampliamente extendido en sectores tan diversos como la automoción, electrodomésticos, ordenadores, teléfonos móviles, IoT (Internet of Things), etc. A modo de ejemplo, podríamos comentar que uno de cada 4 vehículos vendidos en el mundo o una de cada 10 placas de cocción llevan componentes de Fagor Electrónica. En todos esos productos el componente de Fagor Electrónica no está visible a simple vista.
¿Hay más empresas que fabriquen semiconductores en el País Vasco?
En todo Europa, hay algunos fabricantes de semiconductores localizados en Francia, Italia, Holanda, Euskal Herria, Alemania, pero ninguno de ellos fabrica microprocesadores. Los principales fabricantes de microprocesadores se encuentran localizados en Corea, Taiwán y China. Fagor Electrónica es el único fabricante de componentes semiconductores (Discretos) en todo España.
¿Hay demasiada dependencia del mercado asiático a la hora de adquirir semiconductores? ¿Esta crisis ha destapado la dependencia, o ya existía anteriormente?
Tal y como hemos visto en el anterior punto, la dependencia de la fabricación asiática de los microprocesadores es total dado que hace unos 20-25 años la industria electrónica optó por trasladar la fabricación de la mayoría de los semiconductores, incluyendo los microprocesadores, al sudeste asiático. Este traslado fue debido a la necesidad de abaratar los costes de mano de obra, así como a la necesidad de requerir personal capacitado y a las ingentes cantidades de inversión requeridas para llevar adelante la construcción de una planta productiva de microprocesadores (hoy en día, la inversión para construir una nueva planta productiva de microprocesadores viene a ser de unos 14 mil millones de US$). Esta dependencia de las fabricaciones en Asia ha existido siempre, pero debido a algunas consecuencias de la pandemia que han terminado en un mayor consumo de ordenadores, teléfonos móviles, tablets, así como la necesidad de adaptar los teléfonos móviles a la tecnología 5G, o la mayor introducción del vehículo eléctrico, ha generado una disparada demanda de semiconductores y que muchos clientes hayan entrado en lo que se denomina “fase de sobre pedido” llevando todo ello a un colapso de la demanda con respecto a la oferta.
En el mundo de los semiconductores el sector de automoción representa sólo el 10 % del consumo mundial de los semiconductores
¿Se ha notado especialmente en automoción? ¿O también en otros sectores?
Esta crisis se esta notando en todos los sectores, pero sobre todo en automoción, dado que aunque para los habitantes de Euskadi el sector de automoción es muy relevante, en el mundo de los semiconductores el sector de automoción representa sólo el 10 % del consumo mundial de los semiconductores, estando muy por delante en cuanto a consumo y a márgenes de beneficio para el fabricante de microprocesadores, el sector de la telefonía móvil y el de los ordenadores. Además, en el inicio de la pandemia los fabricantes de automóviles, debido a sus políticas de JIT (Just in Time), decidieron anular los pedidos de microprocesadores y dicha oferta excedentaria fue aceptada de buena gana por los fabricantes de telefonía móvil y ordenadores. Cuando los fabricantes de automóviles volvieron a la normalidad y demandaron sus necesidades los fabricantes de los microprocesadores les respondieron que su capacidad productiva estaba ya ocupada por otros sectores y que lamentablemente no podían entregar las cantidades que requerían, aunque siguen entregando un cierto volumen de las mismas.
¿Hay posibilidades en la industria cercana de fabricar más microchips? ¿Es difícil competir en ese ámbito? ¿Por qué?
Debido al altísimo conocimiento tecnológico requerido para fabricar microprocesadores y a las elevadísimas inversiones requeridas es necesario que para tomar la decisión de construir una planta productiva de microprocesadores se requiera una política tecnológica de país o continente y eso hoy en día, en Europa/España es muy difícil de tomar debido a los diferentes intereses de cada gobierno. Como ejemplo y vista la situación acaecida el Gobierno de Joe Biden en USA ha destinado una cifra superior a 150.000 millones de US$ para construir varias plantas productivas de microprocesadores en Arizona y Texas con objeto de asegurarse en el futuro la disponibilidad de los microprocesadores por un lado y por otro lado el control del conocimiento de la tecnología que con el paso de los años puede convertirse en el gran caballo de batalla de las disputas entre continentes (Europa- USA- China).
En el caso de Fagor Electrónica y gracias a la diversidad de sectores en los que se encuentra involucrada y a la diversidad de circuitos electrónicos que fabrica, no hemos tenido necesidad de parar las producciones por el momento
¿Os ha afectado esta crisis? ¿De qué manera?
La falta de microprocesadores ha generado una sensación de pánico en los compradores del resto de componentes semiconductores y “sobrepidan” para cubrirse ante la posible escasez de componentes en los próximos meses. Todo ello está generando impactos continuos en las cadenas de producción para todo el mundo llegando incluso a paradas de producción durante días. En el caso de Fagor Electrónica y gracias a la diversidad de sectores en los que se encuentra involucrado y a la diversidad de circuitos electrónicos que fabrica, no hemos tenido necesidad de parar las producciones por el momento, aunque esto requiera de continuas adaptaciones en la planificación de nuestra cadena de producción en función de la disponibilidad de componentes en el momento de comenzar con la fabricación. No obstante, no descartamos que en algún momento tengamos que parar la producción debido a la falta de microprocesadores o de algún otro componente semiconductor. A todo esto, habría que añadir que la cadena logística de los componentes provenientes de China se ha complicado muchísimo debido a los problemas para embarcar containers de China a Europa y sobre todo a un impacto aún mayor debido al exagerado incremento tanto de los precios de los componentes como del transporte logístico.
¿Mejorará la situación de cara al futuro próximo? ¿Cómo puede responder la industria vasca a este problema?
Mirando al futuro no estimamos que el panorama vaya a mejorar en los próximos meses debido a que ninguno de los sectores demandantes de semiconductores está reduciendo su demanda e incrementar las capacidades de producción de microprocesadores requiere un elevado tiempo. Por todo ello, hoy en día y en base a las previstas nuevas construcciones de plantas productivas de microprocesadores para incrementar las capacidades de producción, se estima que la situación pueda normalizarse para el segundo semestre del 2022 y que durante este tiempo las fabricaciones y el posible crecimiento de muchos sectores vayan a estar limitados a la disponibilidad de los microprocesadores.
Es un panorama que en el mundo de los semiconductores no es la primera vez que sucede, dado que cada cierto tiempo se producen fuertes desajustes entre la oferta y la demanda de alguna de las familias
Esta limitación generará menores cantidades de vehículos, electrodomésticos, equipos fabricados a lo largo del 2021 y parte del 2022 requiriendo por lo tanto una necesidad de adaptación de las líneas de fabricación de muchos sectores a la disponibilidad de microprocesadores. Es un panorama que en el mundo de los semiconductores no es la primera vez que sucede, dado que cada cierto tiempo se producen fuertes desajustes entre la oferta y la demanda de alguna de las familias, conllevando todo ello a enfrentarse a situaciones que requieren mucha flexibilidad, mucha adaptación a la situación y muchísimo trabajo y cercanía con los proveedores, teniendo en cuenta sobre todo el elevado riesgo que conlleva disponer de proveedores únicos localizados a más de 10.000 km de distancia. Sería ideal que de toda esta situación fuéramos capaces de sacar algunos aprendizajes, aunque vistos los movimientos unilaterales que se están produciendo últimamente a nivel europeo no somos muy optimistas para asegurar a futuro la cadena de suministro de microprocesadores desde la propia Europa.