Industria 5.0: la quinta revolución industrial
El desarrollo de la industria ha tenido diferentes revoluciones a lo largo de la historia a partir del S. XVIII. La primera revolución industrial (1.0) estaba basada en la máquina de vapor y aplicada principalmente en la industria textil. Se pasó del trabajo manual a la producción con máquinas. La segunda revolución industrial (2.0) fue la mejora de procesos con las grandes líneas de montaje para la producción en masa junto con la invención de la electricidad, el telégrafo, el teléfono, el fax, etc. La tercera revolución industrial (3.0) se dio gracias a la revolución digital, los ordenadores y la automatización con los autómatas programables e internet.
Esta nueva revolución implica el empoderamiento de la persona en el mundo industrial creando una simbiosis con las máquinas gracias a la inteligencia artificial e internet junto al procesamiento de grandes datos
Ahora, ya en plena cuarta revolución (4.0), no se llega a cumplir con los requisitos que una sociedad moderna requiere, tratando de buscar un equilibrio entre los logros tecnológicos adquiridos y las grandes posibilidades que nos ofrece la Inteligencia Artificial (IA) que se está desarrollando a un ritmo vertiginoso. Por ello se habla ya de la SOCIEDAD 5.0 que pretende utilizar la innovación tecnológica para el bienestar de la humanidad y la sostenibilidad. La industria 5.0 será el motor de la nueva sociedad adaptada a las necesidades del ser humano y del planeta. Esto no es un concepto nuevo. El término Sociedad 5.0 fue creado en 2016 por un centro de tecnologías disruptivas de Japón y se presentó en la feria CeBIT de Hannover.
Aportación de la Industria 5.0
Esta nueva revolución implica el empoderamiento de la persona en el mundo industrial creando una simbiosis con las máquinas gracias a la inteligencia artificial e internet junto al procesamiento de grandes datos y el internet de las cosas para facilitar un trabajo mejor y más llevadero y la mejora de la calidad de vida en consonancia con un entorno medioambiental más sostenible.
Implica una mayor capacidad de las personas y mejorar las condiciones de trabajo a la vez que se logran mayores productividades y seguridad laboral, con un enfoque más centrado en las personas y la sensibilidad por la mejora ambiental reduciendo los residuos y la contaminación, utilizando tecnologías avanzadas.
Reivindiquemos llegar a esta nueva revolución 5.0 para lograr un mayor desarrollo humano y una sociedad mejor
En esta nueva realidad la formación y la educación alcanzan aún mayor importancia para conseguir dicha colaboración entre las personas y las máquinas, lo cual implicará que el talento adquirirá mayor importancia tanto para atraerlo como para mantenerlo. Supondrá también una mayor satisfacción laboral e integración en la empresa que vaya adoptando estas características centradas en la persona.
Y los valores cooperativos están muy en línea con esta nueva filosofía centrada en la dignificación del trabajo y la persona. A muchas empresas de capital, con modelos de gestión conservadores, les costará más llegar a este estadio, ya que el trabajador experimentado, en este mundo desarrollado, concede mayor importancia a la conciliación familiar y a la inversión en las personas y en el bienestar si es que quieren que aporte su conocimiento.
Reivindiquemos llegar a esta nueva revolución 5.0 para lograr un mayor desarrollo humano y una sociedad mejor. Aurrera beti!