La cooperativa, una apuesta por el desarrollo sostenible

La cooperativa, una apuesta por el desarrollo sostenible

Josu Urrutia Beristain, director de Mundukide
El 16 de diciembre de 1992, la Asamblea General de Naciones Unidas proclamó el Día Internacional de las Cooperativas a celebrarse el primer sábado de julio. Desde entonces celebramos este día. Viendo la realidad de este mundo con una creciente desigualdad, graves crisis migratorias y evidentes efectos por el cambio climático, es cada vez más pertinente la apuesta por impulsar alternativas que muestren que otra economía, otras formas de hacer y relacionarse y otro mundo es posible.
09/07/2018

El fenomeno cooperativo

La cooperativa no es un fenómeno marginal. Más de 1200 millones de personas, lo que equivale a uno de cada seis habitantes del planeta, son miembros de alguna cooperativa, de las más de 2,6 millones de cooperativas que existen.

Las cooperativas contribuyen al crecimiento económico sostenible y al empleo de calidad y estable, dando trabajo a 280 millones de personas en todo el mundo, en otras palabras, al 10 % de la población mundial con empleo.

Las cooperativas se centran en las personas, y no en el capital, no perpetúan ni aceleran la acumulación de capital, sino que distribuyen la riqueza de una forma más justa

Pero más allá de estas cifras, el modelo cooperativo se basa en valores y principios éticos que dan prioridad a las necesidades y aspiraciones de sus miembros por delante del puro y simple objetivo de maximizar el beneficio. A través de la autoayuda y del empoderamiento, reinvirtiendo en sus comunidades y preocupándose por el bienestar de las personas y del mundo en el que vivimos, las cooperativas adoptan una visión a largo plazo sobre el crecimiento económico sostenible, el desarrollo social y la responsabilidad medioambiental.

Como empresas propiedad de sus miembros que son dirigidas por ellos y están a su servicio, las cooperativas empoderan a las personas para que logren sus aspiraciones económicas colectivamente, al mismo tiempo que refuerzan su capital social y humano y desarrollan sus comunidades.

Las cooperativas no dejan a nadie atrás

La adhesión abierta de las cooperativas facilita el acceso a la generación de riqueza y contribuye a erradicar la pobreza, como consecuencia directa del principio de participación económica de los socios, quienes contribuyen de manera equitativa al capital de la cooperativa y la gestionan de manera democrática. Debido a que las cooperativas se centran en las personas, y no en el capital, no perpetúan ni aceleran la acumulación de capital, sino que distribuyen la riqueza de una forma más justa.

Las cooperativas también fomentan la igualdad en las comunidades donde se desarrollan, ya que están comprometidas con el desarrollo sostenible en sus aspectos medioambientales, sociales y económicos. Este compromiso se pone de manifiesto en el apoyo a las actividades de la comunidad, el abastecimiento local para beneficiar a la economía del lugar y un sistema de toma de decisiones que tiene en cuenta las repercusiones en su entorno.

Las cooperativas, una apuesta por el desarrollo sostenible

Así, entendemos que no es casualidad que en África la población asociada a cooperativas no llegue al 3%, se sitúe en el 8% de Latinoamérica y en el 13% en el Caribe y Asia. Cuando, en los Estados Unidos de América y Oceanía, el 38% de la población es miembro de una cooperativa y en Europa el porcentaje asciende hasta el 45% de la población.

Por este motivo, y porque entendemos la cooperativa como una herramienta para impulsar un desarrollo sostenible, desde Mundukide apostamos porque las cooperativas y las ventajas de su modelo económico y social lleguen a todos los rincones del mundo. Frente a un modelo actual de globalización que genera desigualdad y excesos que lo hacen insostenible, nuestra apuesta es por unos valores de participación, solidaridad y compromiso con la comunidad que son los que definen al movimiento cooperativista.

En este día internacional de las cooperativas, renovamos nuestro compromiso solidario por compartir la experiencia del movimiento cooperativo vasco, para acompañar el desarrollo autogestionario de agentes del Sur comprometidos con la transformación social.