Más leído
- 1. Javier Amezaga, nuevo director general de la División de Equipamiento de MONDRAGON
- 2. MONDRAGON y Mondragon Unibertsitatea México fortalecen su colaboración para la innovación y el desarrollo de talento en América Latina
- 3. La campaña de ayuda a las personas damnificadas por la DANA sigue activa en Eroski
- 4. Pello Rodríguez se reúne con el lehendakari Pradales
- 5. MONDRAGON celebra su Foro de Finanzas
- 6. Matrici solicita la apertura de la fase de liquidación
- 7. “Estoy muy ilusionado, MONDRAGON es un proyecto apasionante”
- 8. La Política Socioempresarial 2025-2028 de MONDRAGON, en el último número de TU Lankide
- 9. ¡Enhorabuena por medio siglo de cooperativismo!
- 10. "Una victoria de Trump y su repliegue proteccionista, afectarían a Europa"
Tras las reformas, LABORAL Kutxa presenta su sede central más sostenible
La sede central de LABORAL Kutxa se construyó en 1972, en un lugar emblemático para la Corporación MONDRAGON, el Paseo José María Arizmendiarrieta.
Fue él quien, en 1959, dijo simplemente, “hay que hacer un banco” y ofreció así una herramienta de financiación al emergente tejido cooperativo que estaba naciendo en Arrasate-Mondragón (Gipuzkoa) y que se ha convertido en la mayor cooperativa industrial del mundo, con más de 70.000 trabajadores y trabajadoras.
Geotermia y biomasa: un sistema mixto de energías renovables
Al emprender la rehabilitación energética del edificio para dar solución tanto a los requerimientos del aislamiento como a la parte térmica, se optó por un sistema de climatización mixto que combina geotermia y biomasa.
La geotérmica es una energía renovable que se obtiene aprovechando el calor natural del interior de la tierra y de los procesos de interacción de fluidos y rocas que dan origen a los sistemas geotérmicos. Para eso se hacen perforaciones en el terreno para conseguir que el agua circule a una determinada temperatura. En nuestro caso y tras los tests y cálculos de ingeniería geotérmica, realizamos 44 perforaciones a 105 metros de profundidad.
Durante el verano, el edificio se refrigera utilizando únicamente la energía geotérmica, utilizando para ello dos bombas de calor de 200 KW, que mediante un gas refrigerante, consiguen obtener agua a la temperatura adecuada para enfriar el edificio.
En invierno, el aporte extra de energía que requiere la calefacción se consigue con una caldera de biomasa alimentada con astilla de madera de pino local. Todo está pensado para no contaminar: la astilla está libre de residuos y barnices, la ceniza se recicla en puntos verdes y la salida de humos de la caldera cuenta con un decantador de partículas que impide que se liberen residuos al aire.
La calificación A
Lo que comenzó como un proyecto en otoño de 2015 y se alargó durante los dos siguientes años, ha terminado siendo un éxito. La sede central cuenta hoy día con una calificación A, en términos de eficiencia energética. Han conseguido ser pioneros en el sector financiero con un Sistema de Gestión Ambiental para los edificios de la sede central, según la Norma ISO 14001: 2015, certificado por AENOR.